Las puertas o persianas enrollables son las persianas de seguridad para negocios a pie de calle. Estas puertas o persianas enrollables tienen un sistema de apertura por enrollamiento de las lamas al tambor, situado en la parte superior de la puerta. Es un funcionamiento fácil, ágil y seguro, que se puede automatizar fácilmente si el cliente lo desea.
Las persianas enrollables se pueden fabricar en diferentes materiales y acabados, siendo puertas de alta calidad en una amplia gama de diseños, con alta durabilidad y rendimiento.
El uso de puertas enrollables, también llamadas persianas de seguridad, no sólo tiene que reservarse para locales a pie de calle que quieran reforzar su seguridad, también se pueden instalar en garajes, almacenes, muelles de carga y naves industriales. Son una solución económica y eficaz, con alta resistencia a la corrosión y a los eventos climáticos.
Algunas ventajas de las persianas de seguridad son:
- Seguridad: solución más eficaz ante hurtos o robos.
- Fácil instalación: no requieren de obra ni modificaciones de la entrada.
- Instalables en espacios reducidos: al enrollarse sobre sí misma encima de la puerta, no es necesario disponer de espacio extra por donde se deslice la puerta al abrirse.
- Comodidad: estas persianas se suben y se bajan tanto de manera automática como manual. Al estar automatizadas, se suben y se bajan con el contacto de una llave.
- Personalizables: existe gran variedad de lamas y de acabados.
En Portagal fabricamos puertas enrollables en dos tipos de material:
- Puerta enrollable de acero galvanizado: la persiana enrollable con lama de acero galvanizado ciega es la opción más económica. Se puede fabricar en todos los colores de la carta RAL, de cualquier tamaño y forma. Es necesario disponer de 30-40 cm sobre la puerta para que se pueda enrollar.
- Puerta enrollable de aluminio: es el material más empleado en este tipo de puertas. Nuestras puertas, a diferencia de otras, son totalmente soldadas y no clipadas. Existen una infinidad de acabados y tipos de puertas. Son puertas ligeras de alta calidad.
Además, las puertas enrollables se pueden fabricar con diferentes tipos de acabados en función del paso de luz a través de ellas:
- Puertas ciegas u opacas: como su nombre indica, este acabado es opaco y no permite ver qué hay detrás de la puerta.
- Puertas troqueladas o de ventanas: este acabado está formado por rectángulos o mirillas de 138 mm +- de anchura por 53 mm de altura, idóneas para poder ver el expositor estando cerradas.
- Puertas microperforadas: en este caso los espacios son mucho más pequeños, pero permiten igualmente la visión del contenido que se encuentra detrás de la puerta y favorecen la ventilación. Es una opción intermedia entre la puerta ciega y la puerta troquelada.