Skip to content

Problemas comunes y soluciones en puertas automáticas

Las puertas automáticas han transformado el acceso a edificios comerciales, residenciales y públicos, brindando comodidad y seguridad. Sin embargo, como cualquier sistema mecánico y electrónico, las puertas automáticas pueden experimentar fallas que afecten su funcionamiento. A continuación, revisamos algunos de los problemas más comunes que pueden presentar, junto con sus posibles soluciones.

1. La puerta no se abre ni se cierra

Problema: Este es quizás el problema más común en las puertas automáticas. Cuando la puerta no responde al sensor, podría ser por varias razones:

  • Fallo del sensor: Los sensores que detectan movimiento pueden estar obstruidos o dañados.
  • Problemas eléctricos: La fuente de alimentación podría estar interrumpida.
  • Fallo en el motor: El motor que impulsa la puerta podría estar dañado o desgastado.

Solución:

  • Verificar los sensores: Asegúrate de que no haya objetos bloqueando los sensores. Limpia los sensores regularmente para evitar la acumulación de suciedad o polvo, que podría interferir con su funcionamiento.
  • Revisar la conexión eléctrica: Verifica que la puerta esté conectada a una fuente de energía y que no haya fusibles quemados. Si el problema persiste, podría ser necesario contactar a un técnico para revisar el sistema eléctrico.
  • Comprobar el motor: Si el motor no responde, podría estar desgastado o dañado. Un técnico especializado puede realizar una reparación o reemplazo del motor.

2. La puerta se abre y cierra de manera lenta

Problema: Cuando la puerta automática opera de manera más lenta de lo normal, puede ser debido a:

  • Problemas con el sistema de rodamiento: Los rodillos o rieles de la puerta podrían estar desgastados o bloqueados.
  • Fricción en los mecanismos: Las piezas móviles podrían estar desalineadas o con exceso de fricción.

Solución:

  • Lubricar las partes móviles: Usa un lubricante adecuado para mantener los rieles, rodillos y bisagras en buen estado. Evita usar aceite o productos que puedan atraer polvo o residuos.
  • Verificar el estado de los rodillos y rieles: Reemplaza cualquier pieza desgastada o dañada. Si notas ruidos inusuales o movimientos bruscos, es posible que los rieles estén obstruidos, lo que también debe revisarse.

3. La puerta no se cierra completamente

Problema: Si la puerta no se cierra completamente o vuelve a abrirse inmediatamente, es posible que:

  • El sensor esté mal calibrado: El sensor de seguridad podría detectar erróneamente un obstáculo, lo que haría que la puerta permanezca abierta.
  • Problemas con la alineación: Si la puerta no está bien alineada, puede que no cierre correctamente.

Solución:

  • Ajustar la sensibilidad del sensor: A veces, un ajuste de la sensibilidad del sensor puede resolver el problema. Si está demasiado sensible, puede detectar incluso pequeños objetos o suciedad en el suelo como obstáculos.
  • Revisar la alineación de la puerta: Si la puerta está desalineada, es recomendable ajustarla para que pueda cerrar correctamente. Este tipo de ajustes debe ser realizado por un profesional para evitar daños adicionales.

4. Ruidos inusuales durante el funcionamiento

Problema: Ruidos fuertes o extraños como chirridos o golpes suelen ser indicadores de problemas mecánicos:

  • Piezas sueltas: Las bisagras, tornillos o rieles pueden estar flojos.
  • Rodillos desgastados: El desgaste en las piezas móviles puede causar fricción excesiva.

Solución:

  • Apretar las piezas: Revisa y ajusta todas las piezas sueltas, como tornillos o bisagras. Esto puede eliminar los ruidos y mejorar la eficiencia de la puerta.
  • Cambiar rodillos: Si los rodillos están desgastados, reemplázalos por nuevos. Mantener estas piezas en buen estado asegura un funcionamiento suave y silencioso.

5. Fallos en la batería de respaldo

Problema: Algunas puertas automáticas cuentan con baterías de respaldo para operar en caso de fallas eléctricas. Si estas baterías no funcionan correctamente, la puerta podría no abrirse durante un corte de energía.

Solución:

  • Revisar la batería de respaldo regularmente: Es importante hacer un mantenimiento periódico de la batería, comprobando su nivel de carga y su funcionalidad. Reemplaza las baterías que no mantengan la carga o que tengan más de dos o tres años de uso.

Portagal, expertos en puertas automáticas

Las puertas automáticas son una excelente adición para la comodidad y la seguridad, pero requieren un mantenimiento regular para evitar problemas de funcionamiento. Algunos problemas pueden resolverse fácilmente con inspecciones y mantenimiento básicos, pero en situaciones más complejas es recomendable consultar a un técnico especializado para evitar daños mayores o costosas reparaciones. Mantener la puerta bien calibrada y realizar revisiones periódicas no solo extenderá su vida útil, sino que también garantizará un funcionamiento seguro y eficiente

Artículos

Relacionados