- Rápida: apertura y cierre de la puerta muy rápido y eficaz.
- Práctica: muy útil para separar diferentes zonas de trabajo de la nave.
- Estanca: aísla tanto de ruidos como de corrientes de aire.
- Resistente: apta para espacios interiores y exteriores.
- Segura: no presenta elementos rígidos y dispone de mecanismos de seguridad antiaplastamiento.
- Silenciosa: la lona se abre y se cierra sin choques ni ruidos metálicos.
- Estética: disponible en gran variedad de acabados y colores.
- Personalizable: podemos ajustar el diseño a tus necesidades.
- Autorreparable: se reajusta en el carril ella sola.
¿Qué es el sistema de autorreparación?
Si nuestra puerta está en un área de trabajo, es fácil que pueda recibir un impacto con alguna maquinaria. En este caso, la lona se saldrá de su carril para evitar que se rompa.
La puerta de lona autorreparable cuenta con un sistema de cremallera lateral que permite que al recoger la lona ella sola se vuelva a colocar en las guías de su carril.
Esta maniobra de auto-encaje permite que la puerta vuelva a funcionar perfectamente sin necesidad de reparación por parte del servicio técnico.
La instalación de este tipo de puertas automáticas va a suponer un ahorro de costes, ya que tendremos una puerta de uso intensivo con alta fiabilidad y bajo mantenimiento.
Es por esto que las puertas rápidas de lona autorreparables son una de las puertas más empleadas en la industria. Es una de las mejores opciones del mercado para espacios de trabajo.
En Portagal contamos con más de 30 años de experiencia en el sector. Nuestro equipo te podrá asesorar si la puerta automática de lona autorreparable es la mejor opción para tu negocio. No dudes en contactar con nosotros para realizar un estudio personalizado de tus necesidades sin ningún coste.